A diferencia de los animales, las plantas están limitadas en su habilidad de buscar las condiciones favorables para la vida y el crecimiento. Por consiguiente, han evolucionado de muy diversas formas para propagarse y aumentar la población a través de las semillas.
Las plantas que se reproducen por semillas se llaman fanerógamas y son el grupo de plantas más grande del reino vegetal. La semilla o pepita, es cada uno de los cuerpos que forman parte del fruto que da origen a una nueva planta, es la estructura mediante la que realizan su propagación las plantas.
Hay semillas que son muy pequeñas y pesan muy poco como la de la begonias… que en un kilo hay varios millones de ellas. Y por el contrario las hay que son grandes y pesan mucho, como es el caso de los cocos.
Pero las semillas también se comen y componen todo un mundo de posibilidades en cuanto a forma de consumirlas. Algunos ejemplo son:
- Directamente como las pepitas de calabaza, el girasol o los cocos.
- Transformadas como las de trigo, cebada y centeno en pan o tortitas.
- Divertidas como las palomitas de maíz o el cacao envuelto en chocolate.
- Las venden también congeladas como los guisantes.
- Y secas como las habas o las lentejas.
Y aun más, algunas partes de ellas nos dan productos curiosos y muy necesarios, como el algodón, que son las fibras adheridas a la semilla de esta planta.